COMERCIO ONLINE
las ventajas y desventajas de vender online
ventajas
Las ventas online se ha extendido a nivel mundial ,creando una facilidad para obtener los productos deseados ,pero como todo trabajo y comercio tiene una serie de ventajas y desventajas que percutan en la obtención de los determinados artículos ,ya sean de orden nacional o internacional.
Las ventajas del comercio online
Las empresas a nivel mundial se crean una competencia externa , y los consumidores buscan primordial mente economía donde la ventaja es que se reduce los costos real al hacer estudio de mercado ,desaparecen los límites geográficos y de tiempo.se dispone ,de las 24 horas del día, 7 días a la semana, todo el año ,también la Reducción de un 50% en costos de la puesta en marcha del comercio electrónico, en comparación con el comercio tradicional ,se hace más sencilla la labor de los negocios con sus clientes, se reduce considerable de inventarios, se agiliza las operaciones del negocio., proporcionar nuevos medios para encontrar y servir a clientes, la Incorporación internacionalmente de estrategias nuevas de relaciones entre clientes y proveedores., reducción del tamaño del personal y la fuerza de obra, Menos inversión en los presupuestos ,reducción de precios por el bajo coste del uso de Internet en comparación con otros medios de promoción, lo cual implica mayor competitividad, Cercanía a los clientes y mayor interactividad y personalización de la oferta ,Desarrollo de ventas electrónicas. Globalizan y acceso a mercados potenciales de millones de clientes, y se implanta tácticas en la venta de productos para crear fidelidad en los clientes.
Desventajas
Desconocimiento de la empresa. No conocer la empresa que vende es un riesgo del comercio electrónico, ya que ésta puede estar en otro país o en el mismo, pero en muchos casos las "empresas" o "personas-empresa" que ofrecen sus productos o servicios por Internet ni siquiera están constituidas legalmente en su país y no se trata mas que de gente que esta "probando suerte en Internet".
Forma de Pago. Aunque ha avanzado mucho el comercio electrónico, todavía no hay una transmisión de datos segura el 100%. Y esto es un problema pues nadie quiere dar sus datos de la Tarjeta de Crédito por Internet. De todos modos se ha de decir que ha mejorado mucho.
Intangibilidad. Mirar, tocar, hurgar. Aunque esto no sea sinónimo de compra, siempre ayuda a realizar una compra.
El idioma. A veces las páginas web que visitamos están en otro idioma distinto al nuestro; a veces, los avances tecnológicos permiten traducir una página a nuestra lengua materna. Con lo cual podríamos decir que éste es un factor "casi resuelto". (Hay que añadir que las traducciones que se obtienen no son excelentes ni mucho menos, pero por lo menos nos ayudan a entender de que nos están hablando o que nos pretenden vender).
Conocer quien vende. Ya sea una persona o conocer de que empresa se trata. En definitiva saber quien es, como es, etc. Simplemente es una forma inconsciente de tener mas confianza hacia esa empresa o persona y los productos que vende.
Poder volver (post y pre-venta). Con todo ello podemos reclamar en caso de ser necesario o pedir un servicio "post-venta". Al conocerlo sabemos donde poder ir. El cliente espera recibir una atención "pre-venta" o "post-venta".
Privacidad y seguridad. La mayoría de los usuarios no confía en el Web como canal de pago. En la actualidad, las compras se realizan utilizando el número de la tarjeta de crédito, pero aún no es seguro introducirlo en Internet sin conocimiento alguno. Cualquiera que transfiera datos de una tarjeta de crédito mediante Internet, no puede estar seguro de la identidad del vendedor. Análogamente, éste no lo está sobre la del comprador. Quien paga no puede asegurarse de que su número de tarjeta de crédito no sea recogido y sea utilizado para algún propósito malicioso; por otra parte, el vendedor no puede asegurar que el dueño de la tarjeta de crédito rechace la adquisición. Resulta irónico que ya existan y funcionen correctamente los sistemas de pago electrónico para las grandes operaciones comerciales, mientras que los problemas se centren en las operaciones pequeñas, que son mucho más frecuentes.