LOCUS AMOENUS
Un lugar ameno
Un lugar agradable
- un prado con árboles y hierbas
- la presencia de las flores
- un arroyo o una fuente
- una refrescante y perfumada brisa
- el canto de los pájaros
- alejado de ciudades o lugares habitados
Origen del tópico
“ Se fueron las nieves, ya vuelve la yerba a los campos
[ y al árbol
su cabellera; cambia
de modos la tierra y los ríos decrecen corriendo de
[ nuevo
por los cauces de siempre;
la Gracia y las ninfas, hermanas gemelas, desnudas se
[atreven
a dirigir sus coros.
...”
Ejemplos
Gonzalo de Berceo
Yo maestro Gonçalvo de Verceo nomnado,
yendo en romería caeçí en un prado,
verde e bien sençido, de flores bien poblado,
logar cobdiçiaduero pora omne cansado.
Davan olor sovejo las flores bien olientes,
refrescavan en omne las carnes e las mientes;
manavan cada canto fuentes claras corrientes,
en verano bien frías, en ivierno calientes.
Avién y grand abondo de buenas arboledas,
milgranos e figueras, peros e mazanedas,
e muchas otras fructas de diversas monedas,
mas non avié ningunas podridas nin azedas.
La verdura del prado, la olor de las flores,
las sombras de los árbores de temprados savores,
resfrescáronme todo e perdí los sudores:
podrié vevir el omne con aquellos olores.
Nunqua trobé en sieglo logar tan deleitoso,
nin sombra tan temprada nin olor tan sabroso;
descargué mi ropiella por yazer más viçioso,
poséme a la sombra de un árbor fermoso.
Yaziendo a la sombra perdí todos cuidados,
odí sonos de aves, dulces e modulados:
nunqua udieron omnes órganos más temprados,
nin que formar pudiessen sones más acordados.
Gonzalo de Berceo describe un prado verde con flores,un río que en verano está fría y en invierno caliente, un bosque con árboles de todo tipo, que proporcionan una sombra fresca bajo la cual se escuchan el cantar de los pájaros.
Decameron de Boccaccio
En el "Decamerón", los diez narradores se sitúan en un jardín alejado de la ciudad, donde pasan las tardes bajo una arboleda a la sombra fresca que les sirve para alejarse de sus preocupaciones y entretenerse agradable y alegramente, olvidándose de la tristeza.
Églogas de Garcilaso de la Vega
'Oda a la vida retirada' de Fray Luis de León
Del monte en la ladera
por mi mano plantado tengo un huerto,
que con la primavera,
de bella flor cubierto,
ya muestra en esperanza el fruto cierto.
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Y como codiciosa
por ver y acrecentar su hermosura,
desde la cumbre airosa
una fontana pura
hasta llegar corriendo se apresura.
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Y luego, sosegada,
el paso entre los árboles torciendo,
el suelo de pasada
de verdura vistiendo
y con diversas flores va esparciendo.
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El aire el huerto orea
y ofrece mil olores al sentido,
los árboles menea
con un manso rüido,
que del oro y del cetro pone olvido.
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