Rafael Alberti
Poema La Paloma
Nuestra elección entre tantos poemas tan magníficos ha sido, La Paloma del gran poeta Rafael Alberti, porque este habla de una paloma que se equivoca una y otra vez al mirar lo que tiene alrededor, llegando a interpretarlo de forma opuesta.
La Paloma
Se equivocó la paloma,
se equivocaba.
Por ir al norte fue al sur,
creyó que el trigo era el agua.
Creyó que el mar era el cielo
que la noche la mañana.
Que las estrellas rocío,
que la calor la nevada.
Que tu falda era tu blusa,
que tu corazón su casa.
(Ella se durmió en la orilla,
tú en la cumbre de una rama.)
RAFAEL ALBERTI
https://www.instagram.com/p/BB5zQV1qPTU/?taken-by=gonzalo_carrero
Aquí podemos observar una foto de Gonzalo en la que se ve pensativo y dudoso
Rafael Alberti Merello
Nacido en El Puerto de Santa María, (Cádiz), el 16 de diciembre de 1902. Falleció el 28 de octubre de 1999, fue un escritor español, especialmente reconocido como poeta, miembro de la Generación del 27. Está considerado uno de los mayores literatos españoles de la llamada Edad de Plata de la literatura española.
Características generales de la Generación del 98
Los autores de la generación se opusieron a la España de la Restauración.
Comparten una serie de puntos en común:
1. Distinguieron entre una España real miserable y otra España oficial falsa y aparente. Su preocupación por la identidad de lo español está en el origen del llamado debate sobre el Ser de España.
2. Sienten un gran interés y amor por los pueblos abandonados y polvorientos; revalorizan su paisaje y sus tradiciones, estudiando los mitos literarios españoles y el Romancero.
3. Rompen y renuevan los moldes clásicos de los géneros literarios, creando nuevas formas en todos ellos. En la narrativa, la nivola unamuniana, la novela impresionista y lírica de Azorín, que experimenta con el espacio y el tiempo y hace vivir al mismo personaje en varias épocas; la novela abierta y disgregada de Baroja, influida por el folletín, o la novela casi teatral y cinematográfica de Valle-Inclán. En el teatro, el esperpento y el expresionismo de Valle-Inclán o los dramas filosóficos de Unamuno.
4. Rechazan la estética del Realismo y su estilo de frase amplia, de elaboración retórica y detallista, prefiriendo un lenguaje más cercano a la lengua de la calle, de sintaxis más corta y carácter impresionista; recuperaron las palabras tradicionales y castizas campesinas.
5. Intentaron aclimatar en España las corrientes filosóficas del Irracionalismo europeo, en particular de Nietzsche (Azorín, Maeztu, Baroja, Unamuno), Schopenhauer (especialmente en Baroja), y Henri Bergson (Antonio Machado).
6. El pesimismo es la actitud más corriente entre ellos y la actitud crítica y descontentadiza les hace simpatizar con románticos como Mariano José de Larra, al que dedicaron un homenaje.
7. Ideológicamente comparten las tesis del Regeneracionismo, en particular de Joaquín Costa, que ilustran de forma artística y subjetiva.
8. Don Quijote y Segismundo forman el llamado símbolo de la raza.
9. Azorín y Valle-Inclán revolucionan la prosa, por caminos diferentes.
Por un lado, los intelectuales más modernos, sostenían que la generación del 98 se caracterizó por un aumento del egotismo, por un y morboso sentimiento de frustración, por la exageración neorromántica de lo individual y por su imitación servil de las modas europeas del momento.
Por otra parte, para los escritores de la izquierda revolucionaria de los años treinta, la interpretación negativa de la rebeldía noventayochesca se une a una fundamentación ideológica: el espíritu finisecular de protesta responde al sarampión juvenil de un sector de la pequeña burguesía intelectual, condenado a refluir en una actitud espiritualista y equívoca, nacionalista y antiprogresiva.
Los problemas a la hora de definir a la generación del 98 siempre han sido (y son) numerosos ya que no se puede abarcar la totalidad de experiencias artísticas de una extensa trayectoria temporal. La realidad del momento era muy compleja y no permite entender la generación basándose en la vivencia común de unos mismos hechos históricos (ingrediente básico de un hecho generacional).
Esto se debe a un triple motivo:
1.La crisis política de finales del siglo XIX afectó a bastantes más escritores que los englobados en la generación del 98.
2.No se puede restringir la experiencia histórica de los autores nacidos entre 1864 y 1875 (fechas de nacimiento de Unamuno y Machado) al resentimiento nacionalista producido por la pérdida de las colonias. Se afianzaba además por aquellos años en España una comunidad social y económica casi moderna.
3.El auge del republicanismo y la pugna anticlerical (1900-1910), así como importantes huelgas, sindicalismo, movilizaciones obreras o atentados anarquistas.
Características generales de la Generación del 27
1.Intentan la renovación estética de nuestra poesía. Para ello, toman las innovaciones que aportan las vanguardias, aunque sin olvidar la importancia de la tradición literaria española.
2.En sus poemas, cuidan y renuevan la forma a través de la utilización de léxico culto, palabras coloquiales, términos alejados hasta entonces de la poesía, etc.
3.La metáfora se convierte en el recurso literario más importante. Se trata de una figura muy adecuada para expresar los contenidos surrealistas.
4.En cuanto a la métrica, utilizaron estrofas clásicas como el soneto, el romance o el villancico, pero también innovaron con la utilización de versos blancos, versos libres y versículos. En cualquier caso, la libertad métrica es uno de los rasgos característicos de este grupo.
5.Evolucionan desde el punto de vista temático. Al principio la preocupación principal era la forma del poema, el arte por el arte, pero poco a poco (bajo la influencia del Surrealismo) los autores del 27 desarrollan una poesía humanizada, más preocupada por el dolor, la alegría o los recuerdos.
COMPONENTES
1·· Federico García Lorca
2··Rafael Alberti
3··Vicente Aleixandre
4··Jorge Guillén
5··pedro salinas
6··Emilio Prados
7··Manuel Altolaguirre
8··Dámaso Alonso
9··Luis Cernuda
10··Gerardo Diego
COMENTARIO
El autor es Rafael Alberti, y el poema está extraído de su libro Entre el clavel y la espada (1941). Por la fecha deducimos que pertenece a su etapa política, en la que el autor utiliza su poesía para dar a conocer sus ideas e incluso como elemento propagandístico.
El tema del poema es la interpretación errónea del mundo que nos rodea.
El autor habla de una paloma que se equivoca una y otra vez al mirar lo que tiene alrededor, llegando a interpretarlo de forma opuesta.
Es posible que al autor sea la propia paloma contándole sus errores a su amada.
Distinguimos tres partes en su estructura:
– Presentación del tema: la primera estrofa, que expresa la idea principal del poema y se compone de dos versos.
– La parte central del poema está constituida por las cuatro siguientes estrofas, en las que se explican los errores de la paloma, siguiendo la estructura de dos versos, mientras que en el tercero reitera que se equivoca.
– Desenlace: en la última estrofa, también de dos versos, se reflejan las consecuencias de su error: la paloma y la mujer quedan dormidas en lugares no adecuados.
El autor usa en el poema un léxico sencillo y coloquial aunque formal como “paloma” (v. 1) o “cielo” (v. 6). Estos términos se unen formando diferentes campos semánticos tales como la naturaleza (“trigo” (v.4), “agua” (v. 4) o “mar” (v. 6)), el espacio (“Norte” y “sur” (v. 3)) y el tiempo (“noche” y “mañana” (v. 7)).
Aparecen figuras literarias tales como la epífora, consistente en la repetición de palabras al final de una o varias frases, con la que el autor quiere remarcar el tema principal del poema, la equivocación de la paloma; la derivación, que consiste en el empleo en una misma estrofa de palabras derivadas de la misma raíz, que cumple la misma función que la epífora; la antítesis, la contraposición de términos contradictorios, con la que el autor intenta expresar la cantidad de posibilidades que hay al interpretar el mundo; el símbolo, que asocia el plano real e imaginario sin que haya relación aparente entre ellos, con el que el autor intenta conciliar las posibilidades en su interpretación del mundo.