Mohoma
La entrevista después de la muerte
Biografia
"Nací en 575 en una familia pobre de la noble tribu de Quraish, a los seis años me quede huérfano y fui recogido por mi tío Abú Talib, al que acompañaba en sus viajes de comercio. A los veinticinco años me casé con Jadicha, de quien era criado, Jadicha me dio una hija, Fátima, además de una posición social más desahogada como un comerciante respetado en la ciudad. Conocí, si bien superficialmente, las dos grandes religiones monoteístas de su época a través de las pequeñas comunidades cristiana y judía que habitaban en La Meca y también por mis viajes de negocios. Con tan escasa cultura, pues era analfabeto, esto me permitió crear una religión que serviría de base para toda una cultura de difusión universal.A los cuarenta años comencé a retirarme al desierto y a permanecer días enteros en una cueva del monte Hira, en donde recibí la revelación de Dios -Alá-, que me hablaba a través del arcángel Gabriel y me comunicaba el secreto de la verdadera fe. Jadicha me ayudo mucho, comencé a predicar en mi ciudad natal, presentándome como continuador de los grandes profetas monoteístas anteriores. Pero las amenazas a mi seguridad llegaron hasta tal punto que, después de la muerte de Jadicha y de Abú Talib en el 619, decidí huir a Medina el 16 de julio del año 622. En Medina, me convirtí en un caudillo no sólo religioso, sino también político y militar. Los enfrentamientos entre Medina y La Meca culminaron con la conquista de esta última ciudad por los mahometanos en el 630, fruto de la presión militar, de la negociación política y de convenientes enlaces matrimoniales me casé hasta con doce mujeres, nueve de ellas al mismo tiempo. El santuario de la Kaaba fue inmediatamente consagrado a Alá. Poco antes de morir, realicé una peregrinación de Medina a La Meca, que ha servido de modelo para este rito que todo musulmán debe realizar una vez en su vida. Fuí personalmente el creador de la teología islámica, que escribí en el Corán, único libro sagrado de los musulmanes. En los dos últimos años de mi el Islam se extendió al resto de Arabia, unificando a las diversas tribus paganas que habitaban aquel territorio. Eran un conjunto de tribus semíticas politeístas, cuyo continuo estado de guerra entre clanes les había impedido hasta entonces tener protagonismo alguno en la historia. A pesar de haber nacido en una región atrasada y marginal del planeta, y de proceder él mismo de un ambiente modesto, convirtí a las belicosas tribus árabes en un pueblo unido y las embarcó en una expansión sin precedentes. Al morir sin heredero varón, estallaron las disputas por la sucesión, que recayó en mi suegro, Abú Bakr, convertido así en el primer califa o sucesor."