Mark Twain
¿Conoces su historia?
MARK TWAIN, SU HISTORIA.
Mark Twain un aventurero incansable, encontró en su propia vida la inspiración para sus obras literarias. Creció en Hannibal, pequeño pueblo ribereño del Mississippi. A los doce años quedó huérfano de padre, abandonó los estudios y entró como aprendiz de tipógrafo en una editorial, a la vez que comenzó a escribir sus primeros artículos periodísticos; ya en 1851 publicaba notas en el periódico de su hermano. Posteriormente trabajó en imprentas de Keokuk, Iowa, Nueva York, Filadelfia y otras ciudades. Más adelante fue piloto de un barco de vapor, soldado de la Confederación, y minero en las minas de plata de Nevada.
En 1862 comenzó a trabajar como periodista en el Territorial Enterprise de Virginia City (Nevada) y, al año siguiente, comenzó a firmar con el seudónimo Mark Twain, que en el Mississippi significa dos brazas de profundidad (el calado mínimo necesario para la buena navegación).
Sus visiones críticas contra el racismo, el esclavitud y otros temas sociales conflictivos truncaron su vocación de periodista.
A partir de 1864 empezó a frecuentar a otros escritores. En 1867 viajó a Europa y Tierra Santa. En 1870 se casó con Olivia Langdon.
Su talento literario se desplegó plenamente con Las aventuras de Huckleberry Finn (1882), obra ambientada también a orillas del Mississipi, aunque no tan autobiográfica como Tom Sawyer, y que es, sin duda, su obra maestra, e incluso una de las más destacadas de la literatura estadounidense, por la que ha sido considerado el Dickens norteamericano. Cabe destacar también Vida en el Mississippi (1883), obra que, más que una novela, es una espléndida evocación del Sur, no exenta de crítica, a raíz de su trabajo como piloto.
Fue reconocido mundialmente durante los últimos años de su vida, y recibió el doctorado Honoris Causa por la Universidad de Oxford (Inglaterra), en 1907. Murió el 21 de abril de 1910 en Nueva York.
Su primer éxito literario le llegó en 1865, con el cuento corto La famosa rana saltarina de Calaveras
OBRAS PRINCIPALES
Las Aventuras de Huckleberry Finn
Huckleberry Finn es compañero de Tom Sawyer. Son dos figuras que se destacan en la literatura de Norteamérica entre las más vivas y originales.
Estos dos niños simpáticos, traviesos, alocados a veces, han contribuido a la fama de Mark Twain más que ninguno de los personajes surgidos de su extraordinaria imaginación, sin duda porque al pintarlos mezcló en su paleta muchos recuerdos de su propia vida.
No todas las aventuras que describe en este libro son dignas de ser imitadas por los jóvenes lectores. Pero quienes obran mal en estos episodios son castigados; y a menudo lo que parecen locuras no son más que el fruto de una desbordada fantasía infantil en un momento en que la historia de los Estados Unidos es también un tejido de extrañas aventuras, el latir de un pueblo adolescente que busca su equilibrio.
Príncipe y Mendigo
Originalmente, El príncipe y el mendigo estaba pensado para un público infantil, y el propio Twain quiso probar la eficacia del manuscrito leyéndoselo a sus hijas.
Y, en efecto, la historia del muchacho pobre que se convertía en rey, mientras el verdadero príncipe aprendía humildad y misericordia entre la gente miserable, podía haber sido una de las invenciones que Tom Sawyer contaba a sus amigos. Pero Mark Twain no quiso quedarse ahí.
En esta obra pueden rastrearse algunas de las preocupaciones constantes del autor, tales como la superioridad de la democracia sobre los caducos regímenes antiguos, o su obsesión por el parecido y el desdoblamiento de personalidad.
Las Aventuras de Tom Sawyer
Las aventuras de Tom Sawyer es el relato de unos meses en la vida de este niño que vive en una ciudad pequeña del suroeste de Estados Unidos a orillas del Mississippi.
Criado por su tía Polly, que lo quiere de corazón, pero que lo somete a una disciplina que a él se le hace absurda y desagradable.
Tom contempla el mundo de una manera muy diferente a como lo hacen los adultos con los que tiene que convivir. Precisamente porque existe ese distanciamiento nos entretiene con sus reacciones divertidas y nobles.
Más agreste y rebelde contra ese universo de las personas mayores está su inolvidable amigo Huckleberry Finn, que es un chico que vaga por las calles, que fue abandonado por sus padres y es cuestionado por la mirada prejuiciosa de los adultos; pero, sin embargo, admirado por los otros niños que ven en él la imagen misma de la libertad.
Juntos vivirán aventuras humorísticas y dramáticas de las que podrán salir más airosos de lo que hubiera podido hacerlo cualquier adulto.
Al final -siquiera en apariencia- tanto Tom como Huck acabarán siendo conducidos a ese contexto de personas que crecerán y dejarán de ser niños.
Con Las aventuras de Tom Sawyer, Mark Twain empieza a revivir su niñez y su adolescencia mezclándolas con la ficción.
PRIMERA ESCENA
Tom apareció sobre la acera con un cubo de yeso diluído en agua y una brocha de largo mango. Examinó la valla y toda su alegría le abandonó, y una profunda melancolía apoderóse de su espíritu. Treinta yardas de valla de nueve pies de altura, la vida le pareció vacía y la existencia sólo una carga. Suspirando, mojó la brocha y la pasó a lo largo de la tabla superior; repitió la operación; lo hizo de nuevo; comparó el insignificante trozo blanqueado con el inalcanzable continente de valla virgen y, desanimado, sentóse sobre un cajón de madera. ( Aquí Tom coge a alguien de la clase, y dice: ¿Has visto que guay es pintar? Y lo saca a escena)
Tom engañó a muchos niños para que terminaran su trabajo.
Segunda escena
En la escuela, los chicos son envidiados por todos sus colegas; sin embargo, Tom aún no logra recuperar el corazón de Becky. Cuando Tom inconscientemente toma a Becky leyendo el libro del profesor, ella se asusta y rasga el libro. Más tarde, cuando el maestro pide a Becky si ella fue quien rasgó el libro, Tom miente y se incrimina en su lugar. Aunque reciba el castigo por Becky, él consigue reconquistar su amor y llamar su atención.
Tercera escena
Los tres chicos deciden que están cansados de la sociedad y huyen hacia la Isla Jackson, en medio del Mississippi. Cuando los chicos desaparecen, la ciudad asume que se han ahogado y los residentes comienzan a dragar el río en busca de sus cuerpos. En la oscuridad de la noche, Tom sale de la isla para regresar a casa y deja una nota a Tía Polly diciendo que él no está muerto.
En la actualidad
Ernest Hemingway pensaba que toda la literatura norteamericana provenía de Mark Twain. Sin embargo, con la actual sobredosis de revisión cultural que padece Estados Unidos, los clásicos como Las aventuras de Huckleberry Finn están nuevamente cayendo en desgracia.
Así, las nuevas ediciones del libro junto con las ediciones de Tom Sawyer saldrán a luz sin la palabra “negro” y otras que describen a la gente de piel oscura que trabajaban para sus dueños blancos. Las palabras que se consideran ofensivas para los lectores serán sustituidos por la palabra “esclavo”. Esta decisión fue tomada tras una discusión que duró años y en donde los críticos de la obra de Twain señalaban no soportar que a lo largo del libro se repitiera más 200 veces la palabra nigger, un término que en la actualidad se considera tremendamente insultante para los negros.